La compañía de seguridad informática ESET ha detectado el USB Thief, un troyano que utiliza los dispositivos USB para infectar los ordenadores y robar los datos de las víctimas. Es especialmente peligroso porque no deja ningún rastro en el equipo afectado, de manera que el usuario no sabrá que su seguridad se ha visto comprometida.
De acuerdo con el informe de los expertos, este virus, también llamado Win32/PSW.Stealer.NAI, presenta muchas diferencias respecto a las amenazas más habituales. "Sus creadores emplean mecanismos especiales para protegerlo ante la copia o la reproducción, lo que hace que sea aún más difícil de detectar y analizar", asegura Tomáš Gardoň, analista de malware de ESET. 
Este troyano sólo se propaga a través de dispositivos USB, de forma que tiene la capacidad de infectar ordenadores que en principio nos pueden parecer más seguros porque no cuentan con una conexión a Internet.